Álvaro Ruiz |
| En las calles, dirigentes del SUGOV protestan por la decisión de coartarles el medio de comunicación. |
Por Fernando Alexis Jiménez
El sindicato de empleados de la Gobernación del Valle—SUGOV—pasará a la historia como uno de las organizaciones a las que, para acallar sus denuncias, les impusieron una mordaza como califican sus directivos, a la decisión de impedirles difundir sus comunicados a través del sistema interno de correo. “Llevamos más de diez años con ese medio informativo, pero nos lo bloquearon. Es otra de las arbitrariedades a las que nos vienen sometiendo.”, explicó Álvaro Ruíz Erazo.
Este veterano sindicalista fue agredido el 22 de mayo último cuando intentaba ingresar al Palacio de San Francisco un megáfono, artefacto que los guardas de seguridad calificaron de prohibido. Ante su insistencia de entrar el altoparlante, llamaron a la fuerza pública y pretendían su detención. Buscaban aplicarle el Código de Policía Nacional. “No les importó que padezco parkinson ni que estoy en la tercera edad. Pero qué podemos esperar, si aquí han criminalizado la protesta social.”, dijo.
Los sindicalistas detuvieron el tráfico exhibiendo enormes cartelones y, posteriormente, en el primer piso del edificio de la Gobernación, arengaron pidiendo el restablecimiento del correo para enviar correos masivos.
De acuerdo con los dirigentes de esta organización, la decisión de silenciar su medio de comunicación, se debe a denuncias que han venido esgrimiendo, como la contratación o nómina paralela que ha sobrepasado las 3800 personas, situación que ha sido denunciada a los entes de control y hoy está en proceso de investigación.
Igualmente y con fundamento en estudios técnicos, han advertido sobre los peligros que enfrentan los usuarios, tanto externos como internos, con los ascensores en mal estado. Constantemente están averiados.
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| Poner una mordaza al ejercicio del sindicalismo, fue sin duda una de las mayores equivocaciones de la Administración Departamental. |
La existencia de murciélagos que producen enfermedades, el desaseo, la falta de cintas antideslizantes en las escaleras y el mal estado en algunas baterías sanitarias, carencia de material ergonómico, equipos de cómputo obsoletos, entre otros, son sus pilares de denuncia. “Al quitarnos el mecanismo para enviar comunicados, nos están pasando cuenta de cobro a los sindicalistas.”, opina Ruíz Erazo, un economista con 23 años de vinculación, reconocido líder comunitario y uno de los referentes históricos de la Gobernación del Valle del Cauca.
Otro frente de denuncia ha sido la politización del Club de Empleados del Departamento, que siendo privado, tiene una cuota de la Gobernadora.
Protestas que enfurecen a la Gobernadora
A la médica, Dilian Francisca Toro Torres, no le gustan los escándalos. Prefiere las imágenes en las que aparece cargando niños o abrazando ancianas sonrientes, en los pueblos que visita. Es lo que favorece la imagen mesiánica que ha querido promover, de una lideresa que cambió el curso de la historia vallecaucana. Por ese motivo la protesta que protagonizaron directivos del sindicato de empleados SUGOV, la sacó de casillas y con ella, a varios miembros del Gabinete.
El Director del Departamento Administrativo de Desarrollo Administrativo, Guillermo Serrano Plazo, los atacó verbalmente—de lo cual hay testigos—al punto de calificarlos de locos.
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| La dirigencia sindical del SUGOV expresó su temor por lo que pudiera ocurrirles. No hay garantías para el el ejercicio sindical, dijeron. |
“Lo que sorprende es ese lenguaje de quien tiene a cargo el manejo del recurso humano de la Gobernación. Nos han agredido verbal y psicológicamente como ocurrió con el compañero Álvaro Ruíz Erazo, paciente de parkinson ,de la tercera edad y cuya esposa padece de alzheimer. Nos han bloqueado los mecanismos de expresión, ¿qué podemos esperar?¿Que nos declaren objetivo militar? Realmente estamos muy preocupados por nuestras vidas y, por supuesto, por la de nuestros familiares.”, explicó el presidente del Sindicato SUGOV, Juan Carlos Arboleda.
En su criterio, no se puede dar marcha atrás. Hay que seguir denunciando ante la Procuraduría, la Defensoría del Pueblo y el Ministerio del Trabajo, como hasta ahora, con el apoyo de la CUT, central obrera a la que están afiliados.
“Si bien han llenado la Gobernación de Contratistas, es porque los necesitan y si es así, aunque no creemos que a todo ese volumen, pues que los nombren y les brinden garantías laborales como lo establecen sentencias de la Corte Constitucional.”, asegura Arboleda.
Por el momento, están esperando una pronta respuesta por parte de los entes de control a sus denuncias, al tiempo que están reclamando el respeto para su integridad física.
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