
A pesar de que la Gobernación del Valle del Cauca no emitió ni siquiera una Circular abriendo posibilidades para que la gente saliera a marchar, nos dio gusto saber que un buen número de compañeros estuvo con nosotros. Había Decreto de Presidencia de la República y directriz del MinTrabajo.
Lo que ocurrió hoy en Cali, las principales capitales, ciudades intermedias y municipios, fue apoteósico. Literalmente ríos de gente. ¿Cuántos asistieron? Difícil de cuantificar. En el caso de la Sultana del Valle cuadras y cuadras de expresiones populares.
Hubiésemos querido que se respetara el conducto regular, que era el Congreso, pero allí no quieren a los trabajadores. No somos de la misma élite que ellos, que ganan mensualmente $48 millones, además de las arandelas que todos saben.
Como solía repetir el filósofo de Vijes: “Al César pidieron ir, al César irán”. En otras palabras, nos vamos a Consulta Popular. Y los cálculos nos hacen pensar que sí pasaremos el umbral, porque nadie va permitir que le vayan a “patear la lonchera”
EL PUEBLO TOMA CONCIENCIA
Estamos luchando no solo por los catanos a las puertas de jubilarnos o por los que están a mitad de camino. Estamos luchando por nuestros hijos y nietos, por las nuevas generaciones.
A propósito, en la avenida Las Américas dos cuadras de gente pidiendo que les entreguen medicamentos. ¿Es esa la salud que queremos para el país, que se lucra con el dolor de los enfermos? Por supuesto que no. Vamos por la Consulta Popular.
O las señoras que a pleno solazo vendían helados o confites en el trayecto hacia la Plazoleta de San Francisco. Ganándose unos pocos centavos. ¿Es ese el ingreso salarial y la falta de pensión que queremos para una inmensa mayoría? En absoluto. Vamos por la Consulta Popular.
Desde el SUGOV saludamos que numerosos empleados y contratistas acompañaron la movilización, pese a la ambigüedad de la administración departamental que jamás se pronunció alrededor del Día Cívico o, al menos, brindar las garantías para que la gente saliera.
A la oposición gracias por la torpeza con la que siguen atravesándose a las reformas del cambio, con cada paso en falso que dan, más colombianos se resisten a seguir bajo un sector político alineado con la esclavización de los trabajadores.
Y concluimos con algo: no era necesario blindar de antimotines el edificio central. La movilización fue pacífica. Una expresión de gozo, porque la respuesta es esa: dando la pelea, pero en paz y gozo porque vamos a lograr el apoyo necesario para sacar adelante las Reformas Sociales…