Es urgente que el gobierno nacional asuma el compromiso de –literalmente—reconstruir esta vía, que en cierta medida es una columna vertebral para impulsar el desarrollo en un amplio sector de Nariño.
Fernando Alexis Jiménez | Dirigente sugoviano
Probablemente por el letargo que dejó el período decembrino y los ecos todavía frescos del Carnaval de Negros y Blancos, la muerte de una mujer cuando era trasladada en ambulancia en la vía Magui Payan, pasó desapercibido. Se perdió en la infinidad de titulares de los periódicos y los noticieros de radio y televisión.
Quienes todavía tienen latente el dolor por su partida, son los familiares de Mary Luz Cabezas. No podían entender de qué manera todo se conjugó para que falleciera su ser querido. De un lado, el estado inconcluso del hospital de Magui–lo que obliga el traslado de pacientes a Barbacoas–y de otro, que el trayecto parece más una trocha que una carretera. Es pésimo.
Cubrir la distancia que separa las dos localidades se convierte en una tortura.
Por muchos años la vía Magui Payán – Barbacoas ha sido el caballito de batalla de aspirantes a cargos de elección pública, a nivel nacional, regional y local. Las ilusiones florecen, las sonrisas afloran en el rostro, pero conforme va pasando el tiempo, nuevamente a millares de personas en la región, las gobierna la desesperanza.
Hay quienes dicen, en el cementerio hay muchas cruces de hombres y mujeres que partieron a la eternidad esperando la materialización de se sueño..
Ya es suficiente con el hecho de que las familias del lugar deban enfrentar los hostigamientos de grupos armados, el desplazamiento y la zozobra permanente, para que además deban morir como consecuencia del olvido estatal.
Lo que sigue, ahora, es la urgencia de que el gobierno nacional asuma el compromiso de –literalmente—reconstruir esta vía, que en cierta medida es una columna vertebral para impulsar el desarrollo en un amplio sector de Nariño.
Este Departamento como el Cauca y Putumayo, no pueden seguir siendo la Cenicienta del país, cuando históricamente han hecho aporte significativo para su desarrollo.
NOTA IMPORTANTE: El presente artículo forma parte de la columna semanal que publica el autor cada domingo en el Diario del Sur, periódico con circulación impresa en el suroccidente colombiano y en formato digital. Le compromete únicamente como autor, porque lo expresado no necesariamente interpreta el pensamiento sugoviano.