Millares de personas de todos los países latinoamericanos, emigran diariamente hacia Estados Unidos. Sin embargo, “el sueño americano” para quienes lo alcanzan, se convierte en un foco de explotación inhumana, aprovechándose de las circunstancias de ilegalidad en la que se encuentran.
Publicado con datos de agencias de prensa
La policía antidisturbios y el ejército de Guatemala, dispersaron por la fuerza este lunes -por segundo día consecutivo- una caravana de miles de migrantes centroamericanos, principalmente hondureños, que busca llegar a Estados Unidos.
Según medios locales, las autoridades volvieron a usar gases lacrimógenos y golpearon con palos a los integrantes del grupo, que se habían vuelto a organizar y bloquearon una carretera tras ser reprimidos el domingo.
Los reportes indican que la policía dio a los migrantes 10 minutos para despejar la vía y, ante la falta de respuesta, arremetieron contra ellos.
“El contingente avanzó con fuerza sobre la multitud golpeando ruidosamente sus macanas contra los escudos y lograron que unos 4.000 migrantes retrocedieran o corrieran hacia los lados y se dispersaran aún en territorio guatemalteco, pero dejando la ruta libre”, contó un corresponsal de la agencia AFP.
Las autoridades de Guatemala aseguran que al menos una veintena de personas en la caravana ha dado positivo a covid-19.
Esta primera caravana de 2021 tras la posesión del presidente electo de EE.UU., Joe Biden. Biden prometió en su campaña un enfoque más humano hacia la migración, en contraste con las duras políticas del presidente saliente Donald Trump.
Los migrantes dicen tener la esperanza de una posible flexibilización de las políticas migratorias de Estados Unidos cuando Biden asuma el próximo miércoles.
Sin embargo, miembros de su gabinete han pedido a los migrantes regresar a casa y han asegurado que no habrá cambios inmediatos en las políticas migratorias que los beneficien.
¿Quiénes son los migrantes?
El grupo está formado por unas 6.000 personas, que partieron de Honduras entre el jueves y el viernes.
Durante los incidentes del domingo en la ciudad de Chiquimula, cerca de la frontera entre ambos países, varias personas resultaron heridas, de acuerdo con los reportes.
Los migrantes aseguran que se han visto obligados a huir de la pobreza, la violencia y la devastación causada por dos grandes huracanes en noviembre pasado y quieren llegar a Estados Unidos vía México.
¿Qué dicen los gobiernos?
La víspera, el gobierno de Honduras había pedido a su par guatemalteco investigar los hechos de violencia registrados en la frontera.
El gobierno guatemalteco, por su parte, asegura que los migrantes violaron los protocolos migratorios y las normas de prevención del covid-19 para ingresar al país.
Indicó, además, que deportaron a casi 1.000 personas a Honduras en los últimos tres días por ingresar ilegalmente al país.
El procurador de Derechos Humanos de Guatemala, Jordán Rodas Andrade, tildó de “deplorable” el accionar de las fuerzas de seguridad contra los migrantes y dijo que hay que tener “empatía y solidaridad”.
Con las promesas de Joe Biden, lo que se estima que es e estimularán nuevas olas migratorias de latinoamericanos.